Gobierno brasileño busca desestimular las compras en los países vecinos

El Gobierno brasileño informó la suspensión provisional de una medida anunciada el pasado lunes para desestimular las compras en países vecinos por parte de consumidores que atraviesan la frontera por vía terrestre o fluvial y que había generado críticas de comerciantes en ciudades limítrofes.
El secretario de la Administración Federal de Impuestos de Brasil, Carlos Alberto Barreto, explicó en declaraciones a periodistas que la medida no puede entrar en vigor por el momento debido a que aún tiene que ser reglamentada y que no hay previsión de cuándo podrá ser aplicada.
Según un decreto publicado en el Diario Oficial de la Unión, el valor límite de compras que los brasileños pueden hacer en países vecinos sin pagar impuestos de importación sobre los mismos a la hora de atravesar la frontera terrestre bajará desde los actuales trescientos dólares hasta ciento cincuenta dólares cuando la medida entre en vigor.
Jurídicamente la medida entraría en vigor inmediatamente con su publicación en el diario oficial, pero Barreto aclaró que aún no ha sido reglamentada.
La medida sólo se aplica a los bienes que entren a Brasil por tierra o por río, por lo que afecta tan sólo a los países limítrofes y excluye a los turistas que viajan en avión, a los que se mantuvo un límite de 500 dólares en compras sin impuestos.
Según el funcionario, los brasileños podrán seguir ingresando a Brasil por vía terrestre con compras por hasta trescientos dólares sin pagar impuestos por al menos un año o hasta que la reglamentación entre en vigor.
Agregó que no puede definir el plazo para ello debido a que la reglamentación prevé la entrada en operación de tiendas libres de impuestos en las principales ciudades fronterizas de Brasil.
“Vamos a prorrogar la vigencia del régimen que existe hasta hoy por entre seis meses y un año. Todo va a depender de que los respectivos municipios las autoricen (las tiendas libres) y de que se definan los locales y los inversores”, explicó.
Cuando entre en vigor, los brasileños que ingresen al país por vía terrestre o fluvial con compras por más de 150 dólares tendrán que pagar un impuesto de importación equivalente al 50% sobre el valor en exceso.
Las compras realizadas en las tiendas libres en las ciudades fronterizas estarán exentas de ese impuesto hasta un límite de 300 dólares.
El futuro régimen puede tener repercusión en el comercio de tradicionales destinos de compras fronterizos como las urbes paraguayas de Ciudad del Este y Pedro Juan Caballero, donde los brasileños acuden para adquirir electrónicos y perfumes, entre otros productos.
En los últimos años, el Gobierno brasileño ha tomado una serie de medidas para elevar los impuestos a las compras que los brasileños realizan en el extranjero, lo que ha incluido el aumento de las tasas en los pagos mediante tarjetas de débito y de débito.
Los brasileños gastaron en sus viajes internacionales 10.301 millones de dólares entre enero y mayo pasado, según los datos más recientes del Banco Central. Fuente: Montevideo Portal.