Rivera, jueves 18 de abril de 2024
Suplemento “El Deportivo”:

El Estadio “Atilio Paiva Olivera” siempre en el ojo de la tormenta

En estos últimos años, el Estadio Municipal “Atilio Paiva Olivera” ha estado en el ojo de la tormenta. Muchos son los comentarios, las comparaciones y las discusiones que se encaran en relación a su utilización.
No podemos perder de vista que todo esto comenzó en el momento que se decidió cambiar, allá por el año 1994, cuando se resolvió que Rivera iba a ser sede de una de las series de la Copa América disputada al año siguiente en nuestro país.
Serie que no trajo las consecuencias que se presumía. No vino la cantidad de brasileños que se aguardaba y es más, no podemos olvidar que aquí jugaron dos de las mejores selecciones de fútbol del mundo en aquel momento, como Argentina y Brasil, y no se vendieron más de siete mil entradas y hubo que otorgar el derecho del dos por uno para que se pudiera ver a unas quince mil personas en las tribunas.
La Copa terminó y el estadio quedó allí. Denominado el “elefante blanco” nos costó muchísimo al fútbol riverense, que nunca más pudo hacer uso del mismo por lo elevado de sus costos de funcionamiento.
La Intendencia no puede distraer fuertes sumas de dinero para mantenerlo en las mejores condiciones y el fútbol no tiene capacidad económica para hacerlo.
Entonces no queda otra que verlo como se desmerece día a día, hasta que por imperio de alguna mano colaboradora y algún hecho casual se pintó luego de casi veinte años y nada más.
Los aficionados no logran entender que hay una Ordenanza Municipal que regula la actividad que allí se desarrolla y que la Comisión Honoraria Administradora debe ajustarse a ella.
La propia Comisión Honoraria Administradora del Estadio Municipal (CHADEM), en la persona de su Presidente, es criticada a menudo, pero la realidad nos muestra que no hay otra alternativa; la Comisión tiene en sus manos la administración de un bien municipal y no puede actuar como si fuera propia, sino que debe regularse por la Ordenanza de referencia.
Si se pretende cambiar, lo primero que hay que hacer es modificar la Ordenanza y los políticos del medio saben bien cómo hacerlo. Es por ello que en este número incluimos el texto de dicho Decreto Municipal. Más información en la edición impresa.

Deja un comentario