“Este tipo de hechos nos indignan. Nos preguntamos, ¿cuál es el motivo?”

Luego de sucesivos incendios intencionales en las escuelas Nº 5 y 120, las autoridades locales de la enseñanza, convocaron a una marcha en repudio de los que se considera un atentado.
Se concentraron en la Escuela Gabriela Mistral (Nº 5) luego de una breve oratoria, caminaron por calle Cuaró hasta el local de la escuela 120, donde se realizó un breve acto.
El inspector Marcelo Alvariza, al referirse a los daños provocados en las escuelas dijo: “En esto tenemos que estar todos unidos. Hoy es una muestra de solidaridad de respeto por este acompañamiento que se hizo por integrantes de la sociedad, de la prensa. Ojalá que estos hechos no se repitan”. Dijo que lo hechos son actitudes de algunos integrantes de la sociedad que tenemos que erradicar. “Esto que se vivió en estos días con el incendio en las dos escuelas nos cala muy profundo”.
Por su parte la Inspectora Departamental de Enseñanza Primaria, Edith Coitinho agradeció la presencia de todos, mencionó a los niños, a los padres, a los vecinos, a los docentes de las escuelas que participaron en la marcha y dijo: “Si la escuela es pública, es de todos, la construimos nosotros, la construye, la paga, la forma, le da sentido el pueblo y, el pueblo somos nosotros. Si el pueblo somos nosotros tenemos que decirle, a esta gente, no solo que no estamos de acuerdo si-no que vamos a estar atentos y, vamos a vigilar. Basta con controlar que no esté gente adentro, o que avisen a la policía”. Aseguró que se va a formar una cadena “una cadena de atención, de cuidado a lo nuestro, a la escuela pública que es la que nos forma como ciudadanos”. Recordó que fue directora de la Escuela 120 y practicante de la escuela 5 para luego calificar la acción del o los incendiarios de “ataque a una estructura que forma moralmente, profesionalmente al ser humano. No podemos permitir que esto continúe”, finalizó.
La directora de la escuela 145, Elizabeth Trindad, también se refirió a los atentados luego de agradecer a los vecinos la participación en la marcha de repudio, se refirió a su indignación ante los hechos “Ante los reiterados hechos acaecidos durante este último mes, muchas son las interrogantes y pocas las respuestas. Creo que entre todos nosotros, maestros, padres, vecinos, la población en general, autoridades, tenemos que ayudarnos para que poco a poco, ir despejando estas interrogantes. Dejarle a nuestros niños un legado diferente, que no quede así porque si, que pasó esto, que barbaridad, se destruyó y que a los niños se les vaya fijando: bueno, ‘tá, no pasa nada, se destruye y no pasa nada. No, vamos a dejarles un legado diferente y, creo yo, con esta actitud que tuvimos en el día de hoy, ya les estamos pasando a nuestros niños algo diferente. Podemos cambiar la sociedad, podemos hacer la diferencia, podemos, con nuestras pequeñas actitudes día a día, marcar la diferencia. Podemos con nuestras pequeñas actitudes, día a día, marcar la diferencia en la sociedad global que estamos. Muchas gracias, vamos a seguir adelante y vamos a reconstruir la escuela pública”.
La maestra María del Huerto, directora de la Escuela Nº 120, no pudo controlar las lágrimas cuando habló ante los vecinos. Ya más calma pero con mucha emoción conversó con NORTE: “este tipo de hechos nos indignan. Nos preguntamos, ¿cuál es el motivo? Es una emoción muy grande. Cuando hablamos de escuela, hablamos de niños, practicamos valores como el amor, como la confianza, el compañerismo. Sabemos que son niños que tratan de cuidar todo lo que hay en la escuela, saben que es de ellos, que es de todos, esto nos toca muy hondo y es una situación difícil”.
La Inspectora Departamental de Enseñanza Primaria Edith Coitinho dijo a NORTE que los niños cuyos salones fueron dañados por el incendio intencional, van a iniciar los cursos al igual que los demás escolares, mientras se reparan los alones. Tiene tres opciones de las cuales se decidirán por una: dictar clases en el Club Rivera Chico, arrendar una casa que se la ofrecieron el miércoles de mañana o, arrendar ómnibus que trasladen a los niños a una escuela donde hay salones disponibles.

LA NIÑA QUE LLORÓ
Emily tiene 6 años, participa en el programa “Verano Solidario” en la escuela 137 de Punta de Cuñapirú. Junto a su maestra y a sus demás compañeritos, participaron en la marcha de repudio, cuando llegaron a la escuela 120, corrió a su salón donde el año pasado cursó jardinera, lo vio destruido, en lugar de los bancos, las mesas, escombros, maderas quemadas, donde estaba el pizarrón, una pared tiznada. Casi gritó “Mi salón” y se puso a llorar.